Los fármacos son sustancias químicas y moléculas de importancia terapéutica. El metabolismo de los fármacos es la conversión enzimática de fármacos en una nueva molécula dentro del cuerpo humano. Puede producir un metabolito activo, inactivo o tóxico en este proceso. También se puede definir como biotransformación de productos químicos terapéuticamente beneficiosos en una o más reacciones sucesivas. Las reacciones varían según las diferentes especies de fármacos.
El metabolismo, en su mayoría, inactiva el fármaco, aunque ciertos metabolitos son más activos que el fármaco original. Un metabolito activo de un fármaco débil se denomina profármaco. La tasa de metabolismo de los fármacos aumenta con la concentración del fármaco.
Sitio de acción
En el proceso del metabolismo de las drogas, las drogas experimentan un cambio químico iniciado por el cuerpo. El hígado es el sitio principal de esta biotransformación, pero también hay otros sitios que participan en el metabolismo de fármacos específicos. El sistema enzimático del citocromo P-450 juega un papel activo en el metabolismo de los fármacos, ya que pueden ser estimulados o inhibidos por los distintos fármacos, afectando así la eficacia de todo el proceso. Esto, en consecuencia, mejora o suprime la actividad del fármaco.
El citocromo P-450 es una superfamilia de isoenzimas. Los electrones de la NADPH-CYP450 reductasa inician la oxidación del compuesto farmacológico mediante la transferencia de electrones de NADPH (la forma reducida de fosfato de dinucleótido de nicotinamida y adenina) a CYP450. Como lo define el nombre, “efecto de primer paso”, describe ese fenómeno en el que algunos medicamentos son metabolizados por los tejidos hepáticos inmediatamente después de la absorción. Posteriormente, los metabolitos se liberan en la bilis, dejando así los fármacos menos activos en el hígado.
Reacciones del metabolismo de fármacos
El metabolismo del fármaco puede tener lugar mediante oxidación, hidrólisis, reducción, conjugación o isomerización; todas estas reacciones bioquímicas están destinadas a hacer que el fármaco sea menos tóxico y fácilmente excretable. Las tasas de metabolismo pueden variar: algunos fármacos experimentan un metabolismo rápido en algunas personas, pero puede ser lento en otras. El metabolismo rápido no permitirá que el fármaco alcance la concentración terapéutica activa en el cuerpo. El metabolismo lento puede hacer que el fármaco sea tóxico para el organismo. Todas estas tasas metabólicas dependen de los factores genéticos y de la aparición de cualquier enfermedad hepática crónica o trastornos cardiovasculares debido a los cuales ciertos medicamentos pueden interferir en el metabolismo de los fármacos.
Fases del metabolismo de los fármacos
El metabolismo de los fármacos implica dos fases, cuya aparición puede variar de un compuesto a otro. Algunos fármacos experimentan únicamente reacciones de fase I o fase II; los números de fase describen la clasificación funcional pero no la clasificación secuencial.
1. Las transformaciones de fase 1 son reacciones no sintéticas. Implican las reacciones de funcionalización. Estas reacciones crean un grupo funcional o modifican uno existente mediante ciertas reacciones como hidrólisis, oxidación o reducción.
2. Las transformaciones de fase 2 describen las reacciones de conjugación, en las que un fármaco o un metabolito se acopla con una molécula de conjugación endógena (p. Ej., Sulfato, ácido acético, glicina) y se trata de reacciones sintéticas. La glucuronidación es la reacción de fase II más común, seguida de la acetilación y la conjugación sulfo. Los sulfatos se excretan fácilmente.
En el metabolismo del fármaco, se espera que los metabolitos sean más bajos que el fármaco original debido a la adición de un grupo ionizable. Esto facilita su excreción más rápida. Sin embargo, existen ciertas excepciones que pueden provocar toxicidad en sangre debido a metabolitos de fármacos. Es muy importante el seguimiento específico de los fármacos para identificar sus límites terapéuticos y tóxicos en un paciente.