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Las personas a menudo se confunden entre dos enfermedades gastrointestinales, a saber, la enfermedad inflamatoria intestinal (EII) y el síndrome del intestino irritable (SII). El IBS es una enfermedad funcional por naturaleza, mientras que la IBD es una enfermedad estructural. Aunque estas dos enfermedades crónicas causan dolor de estómago, hinchazón, calambres y diarrea en los pacientes, las causas y las opciones de tratamiento son completamente diferentes.
Causas
Aquí hay algunas causas de IBS:
- El IBS es un trastorno del tracto gastrointestinal. Esto afecta el tracto gastrointestinal inferior, es decir, el intestino delgado, el intestino grueso y el colon. Para muchos pacientes, el IBS se ha originado con una intoxicación alimentaria.
- Esta enfermedad necesita un tratamiento a largo plazo y la mayoría de los pacientes pueden controlar los síntomas mediante restricciones dietéticas.
- Contracciones intestinales frecuentes, daño nervioso en el sistema digestivo que conduce, menor inmunidad de los intestinos, infección del intestino, menor porcentaje de microflora en los intestinos, etc. son las principales causas del SII.
Las causas de la EII son:
- La EII es una enfermedad crónica, que es el término general que se utiliza para describir cualquier inflamación en cualquier parte del tracto gastrointestinal.
- La EII es de dos tipos; colitis ulcerosa y enfermedad de Crohn. La colitis ulcerosa se refiere a la inflamación severa del intestino grueso y el recto. Mientras que la enfermedad de Crohn se refiere a la inflamación del revestimiento del tracto GI que también se extiende a los tejidos adyacentes.
- La dieta inadecuada y el mal funcionamiento del sistema inmunológico se reducen como las razones de la EII. La enfermedad de Crohn incluso puede ocurrir debido a un fuerte hábito de fumar.
Diagnóstico
IBS viene con una multitud de síntomas como:
- Obstáculo
- Diarrea
- Evacuación intestinal frecuente
- Necesidad de defecar
- Gas
- Dolor de vientre
- moco en las heces
- sangre en las heces, etc.
Los médicos identifican el SII si el paciente se ha quejado de dolor de estómago al menos 1 día a la semana durante un período de observación de 3 semanas.
La EII se puede diagnosticar con síntomas como:
- Diarrea
- Fiebre
- Sangre en las heces
- Obstáculo
- Apetito reducido
- Pérdida de peso, etc.
La EII implica daño estructural del tracto gastrointestinal y, por lo tanto, se puede identificar mediante rayos X, tomografías computarizadas, endoscopia, cirugía o incluso una biopsia.
Tratamiento
- El IBS se puede tratar por completo cambiando el patrón dietético. Se debe incluir más fibra, beber mucha agua, evitar los productos con lactosa y reducir los alimentos que pueden causar gases en la dieta diaria.
- La EII es el resultado de la inflamación y, por lo tanto, debe tratarse con medicamentos que curen la inflamación. Si la inflamación es grave, el médico puede sugerir una cirugía para extirpar por completo la parte afectada del colon.
Prevención
Tanto el SII como la EII se pueden prevenir si uno sigue un hábito de alimentación saludable con menos especias y bebe mucha agua. La higiene previene en gran medida las infecciones. Muchas veces, la reducción de los niveles de estrés, la meditación, etc. ayudan a curar estas enfermedades gastrointestinales.
La EII y el SII son dos enfermedades diferentes. Si bien la EII no tratada puede terminar en complicaciones graves como cáncer colorrectal , coágulos de sangre, etc., el IBS no tiene efectos tan potencialmente mortales. Con la detección oportuna y la intervención del médico, tanto la EII como el SII pueden controlars.