¿Qué es?
El síndrome metabólico es un grupo de cinco síntomas que se observan debido a un metabolismo alterado que aumenta el riesgo de enfermedad cardíaca, accidente cerebrovascular y diabetes. Si bien tener una de estas afecciones de forma aislada no es un problema, tener 2 o más de estas aumenta el riesgo de desarrollar problemas de salud. Estos cinco síntomas son:
- Aumento de la presión arterial por encima de 130/85 mmHg
- Aumento de azúcar en sangre (resistencia a la insulina)
- Peso corporal excesivo alrededor de la cintura (grasa periférica)
- Niveles más bajos de HDL (lipoproteínas de alta densidad)
- Niveles de triglicéridos anormalmente altos
Factores de riesgo
Con los hábitos alimentarios alterados y el estilo de vida sedentario, la incidencia del síndrome metabólico va en aumento, y la Asociación Estadounidense del Corazón estima que entre el 25% y el 30% de los adultos estadounidenses tienen síndrome metabólico. Otros factores de riesgo incluyen:
- El riesgo aumenta con la edad.
- Un historial familiar de diabetes, enfermedad cardíaca o síndrome metabólico pone a uno en mayor riesgo de desarrollar el síndrome.
- Estilo de vida sedentario, donde la inactividad es un problema importante.
- Resistencia a la insulina, donde el cuerpo no responde a la insulina, que es útil para controlar los niveles de azúcar.
- Síndrome de ovario poliquístico en mujeres.
- Apnea obstructiva del sueño .
- La enfermedad grasa del hígado.
- Obesidad central (grasa alrededor del abdomen y cintura).
Síntomas
El síndrome metabólico no tiene síntomas propios, aunque tendría síntomas de todas estas condiciones. La persona tendría sed, orinaría con frecuencia, se sentiría letárgica y tendría visión borrosa. Físicamente, la circunferencia de la cintura sería más alta de lo normal, lo que puede llevar a una investigación y un diagnóstico.
Tratamiento
El síndrome metabólico no se puede tratar, pero debe controlarse con una combinación de medicamentos y cambios en el estilo de vida. El azúcar en sangre, la presión o el colesterol elevados deben controlarse con medicamentos y luego mantenerse dentro de los rangos normales. Además, los cambios en el estilo de vida son esenciales, incluidos los cambios en la dieta y el ejercicio regular para garantizar que la condición no empeore.
Prevención
Para quienes corren el riesgo de desarrollar síndrome metabólico, los cambios en el estilo de vida pueden ayudar a prevenir la aparición del problema. Éstos incluyen:
- Ejercicio regular, al menos de 30 a 40 minutos, de forma regular
- Los cambios en la dieta incluyen reducir la ingesta de sal y azúcar, aumentar el contenido de fibra y reducir las grasas saturadas.
- Mantener el IMC en un nivel óptimo
- Dejar de fumar
- Chequeo médico regular para asegurar que los niveles de azúcar en sangre, colesterol y presión estén dentro de los límites normales.
Las personas con síndrome metabólico corren el riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas, diabetes y accidente cerebrovascular. Sin embargo, los cambios en el estilo de vida pueden ayudar a retrasar la aparición y evitar que surjan complicaciones. Saber que podría tener el síndrome es fundamental para que se puedan realizar los cambios.