Está comprobado sin lugar a dudas que los hábitos alimentarios alterados con alimentos envasados y procesados durante las últimas décadas son uno de los mayores contribuyentes a muchos problemas de salud actuales. A esto se suma el estilo de vida sedentario.
Hay mucha inflamación generalizada en todo el cuerpo, desde el estómago donde se digiere hasta todo el cuerpo donde se distribuye. La diabetes y las enfermedades cardíacas, que traen consigo una serie de complicaciones, ahora se consideran afecciones inflamatorias.
Cambiar la dieta puede ayudar a reducir la inflamación existente y prolongar la aparición de una nueva inflamación. Si uno ya tiene afecciones como diabetes, enfermedades cardíacas y artritis, los cambios en la dieta pueden ayudar a retrasar o reducir las complicaciones y mejorar la calidad de vida en general. A continuación se enumeran algunas pautas para una dieta antiinflamatoria.
Una dieta antiinflamatoria es buena para el sistema digestivo y el cuerpo. Tiene muchas frutas, verduras, hierbas frescas y especias, nueces y granos y pescado graso.
- Las frutas y verduras no solo son buenas fuentes de fibra, sino también ricas en minerales y vitaminas. Añadiendo verduras y frutas de varios colores: cada color aporta sus propias ventajas.
- La espinaca y el brócoli son conocidos por ser ricos en hierro y reducir la inflamación.
- Los tomates y las zanahorias tienen caroteno y las bayas ayudan a combatir la inflamación.
2. Las hierbas y especias se utilizan en pequeñas cantidades, pero están supercargadas de beneficios medicinales y, por lo tanto, deben agregarse a sus comidas. El ajo , el jengibre , la cúrcuma y el comino realzan su comida no solo en sabor y sabor.
3. Los cereales integrales deben sustituirse por harinas refinadas, ya que aportan fibra, son fáciles de digerir y reducen la inflamación.
- Elija pan integral o pan multigrano en lugar de pan blanco.
- Use mucho arroz integral y avena y observe cómo mejora su digestión.
4. Nueces y semillas, nueces, cacahuetes, nueces pecanas, semillas de calabaza, semillas de lino, semillas de chía, pistachos y coco son todos ricos en aceites naturales y ayudan a combatir la inflamación. Supuestamente son ricos en calorías, así que úselos con moderación.
5. Pescado: Cualquier pescado, ya sea salmón o atún, tiene ácidos grasos omega-3 y ayudan a reducir la inflamación.
6. Cocinar es difícil sin aceite, por lo que reducir la cantidad de uso y sustituir el aceite de oliva por aceite refinado de cocina. Ayuda a mejorar la inflamación y reduce el colesterol. Las grasas son esenciales, deben elegirse sabiamente.
Si bien estos son los que tiene en su plato, los siguientes también son igualmente importantes para que una comida antiinflamatoria funcione bien.
- Sueño : la cantidad y la calidad del sueño son importantes para que la dieta anterior funcione bien.
- Ejercicio : lo que sea que funcione para usted, asegúrese de que su cuerpo se ejercite regularmente. Estar activo y en movimiento es la clave para una vida saludable.
- Peso corporal : esta no es una hazaña única, sino que requiere un esfuerzo constante.
Realice estos cambios y vea cómo desaparecen el dolor de la artritis y los brotes de azúcar con la diabetes.