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¿Qué es la lepra?
La lepra (también conocida como enfermedad de Hansen ) es una enfermedad crónica y contagiosa causada por una bacteria llamada Mycobacterium Leprae. Debido a la alta tasa de transmisión, la lepra constituye un importante problema de salud en muchos países. Se estima que el 64% de los casos de lepra ocurren en India. Es una de las causas importantes de neuropatía periférica en todo el mundo.
Mycobacterium Leprae fue descubierto por Armauer Hansen. Por lo tanto, la lepra se denomina enfermedad de Hansen después de su nombre. Esta enfermedad se consideró una condición letal en el pasado, pero la medicina en evolución y la tecnología moderna ayudaron a controlar la enfermedad con facilidad.
¿Cómo se contagia la lepra?
Las bacterias se reproducen muy lentamente, tarda de 12 a 14 días en reproducirse dentro de las células. El crecimiento bacteriano es muy lento y, por lo general, crece en macrófagos y células de Schwann del individuo infectado.
El período de incubación de la enfermedad es de hasta 5 años.
¿Cuáles son los síntomas de la lepra?
La enfermedad se desarrolla lentamente y daña la piel y el sistema nervioso periférico. Las bacterias también invaden los ojos y el tejido delgado que recubre la nariz internamente.
Los síntomas pueden tardar hasta 20 años en aparecer.
Las manifestaciones cutáneas incluyen: Llagas, protuberancias o bultos en la piel deformados que persisten durante varias semanas o meses. Las llagas son generalmente de color pálido. También se observan ampollas y úlceras en la piel.
Causas del daño nervioso: pérdida de sensibilidad en los brazos, piernas y pies, sensación de hormigueo, lesión nerviosa y pérdida de peso.
¿Cuáles son los factores de riesgo de la lepra?
La lepra afecta a todas las personas independientemente de su edad y antecedentes. Sin embargo, algunos factores influyen en la lepra. Ellos son:
- Existe un alto riesgo de desarrollar lepra para las personas que viven en áreas endémicas como India, China, Japón y otras.
- El riesgo de infección es alto en personas con defectos genéticos en el sistema inmunológico.
- Existe el riesgo de contraer la infección a través de ciertos animales como el chimpancé africano y otros portadores de bacterias.
¿Cuáles son las complicaciones de la lepra?
El diagnóstico tardío y el tratamiento de la lepra dan lugar a complicaciones graves. Incluyen:
- Ceguera
- Congestión nasal crónica, hemorragias nasales y colapso del tabique nasal.
- Desfiguración
- Disfunción eréctil e infertilidad.
- Glaucoma (una enfermedad ocular causada por el nervio óptico dañado)
- Caída del cabello, específicamente en las cejas y pestañas.
- Incapacidad para usar las manos y los pies.
- Iritis (el iris del ojo se inflama)
- Insuficiencia renal
- Debilidad muscular
- Daño permanente a los nervios en brazos y piernas.
¿Cómo se diagnostica la lepra?
El médico realiza un examen físico inicialmente para evaluar los síntomas. Las pruebas de diagnóstico que se realizan incluyen:
- Biopsia de piel: durante este procedimiento, el médico extrae una pequeña cantidad de piel que se envía a un laboratorio para su análisis microscópico. Es uno de los procedimientos indoloros y de bajo riesgo.
- Prueba cutánea de lepromina: el médico inyecta una pequeña cantidad de bacterias que causan la lepra en la piel, preferiblemente en la parte superior del antebrazo, y se observa que se desarrolle la irritación.
- Prueba de frotis cutáneo: se recoge una muestra de frotis cutáneo y se examina para detectar el número de bacilos presentes por campo de alta potencia.
Tratamiento para la lepra:
La lepra es una enfermedad curable. En las últimas dos décadas, se curaron 14 millones de personas con lepra. El médico recetaría antibióticos como:
- Clofazamina
- Dapsona
- Minociclina
- Ofloxacina
- Rifampicina
El médico prescribe más de un antibiótico para tratar la lepra.
Según el requerimiento del paciente, el médico también prescribe medicamentos antiinflamatorios como aspirina, prednisona u ortalidomida.
¿Cómo prevenir la lepra?
La lepra se puede prevenir evitando el contacto cercano con la persona infectada no tratada. Para detener la propagación de la lepra, se recomienda a la persona infectada que se cubra la boca con un paño o un pañuelo de papel mientras tose o estornuda.
Para prevenir complicaciones a largo plazo, se recomienda al paciente que tome los medicamentos recetados durante una duración determinada. Sin embargo, el diagnóstico y el tratamiento oportunos ayudan a prevenir complicaciones y a curar completamente la lepra.
No existe una vacuna específica disponible para la prevención de la lepra. Sin embargo, la vacuna Bacillus Calmette-Guerin (BCG) que se usa para prevenir la tuberculosis es eficaz para prevenir la lepra. La adición de Mycobacterium Leprae muerto a la vacuna BCG aumentaría la eficacia de la vacuna.